17 octubre 2011

No me busques

Pozo iniciático- Quinta da Regaleira-Sintra

No me busques entre rimas de terciopelo,

ni a la diestra de Dios padre,

ni bajo el manto estrellado que tapiza la piel del amor eterno.

No me busques en los pasos de cebra,

ni en el fiel de la balanza,

ni en la moraleja del cuento.

No me busques en el andén de la mesura,

ni a la sombra de un buen árbol,

ni en la abúlica frialdad del camino recto.

No me busques en la calma que precede,

ni en el amén que culmina,

ni en el brocal del pozo de los deseos.

No me busques.

O búscame dentro.






13 septiembre 2011

Nostalgias



Quiebra el vacío un reguero de nostalgias incandescentes.
Un eco indómito, nudoso, escarlata.
Una nube de canela.
Una bandada de jaulas sin dueño.
Un rosario de cuentas afiladas.
Dejo que avancen.
Que tiñan de azogue mis letras transparentes.
Que esparzan su diluvio en mis pupilas,
su resquemor en mi vientre,
su sonrisa en mis quijadas.
Me arrodillo a su paso.
Acato su turbio dictado.
Y mastico su aliento sembrado de gerundios.
                               ... 

10 julio 2011

El que esté sin pecado...



Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo:
 El que de vosotros esté sin pecado
 sea el primero en arrojar la piedra contra ella”
 Jn 8:7




¡Y qué garganta no tiene una espina clavada!

¡Y qué besos no buscan la boca prohibida!

¡Y qué pies no pisaron el fango!

¡Y qué viento no soliviantó un mar en calma!

¡Y qué gota de lluvia no acaricia la frente proscrita!

¡Y qué mansedumbre no fermenta el pecado!

¡Y qué sombra no lame la luz que enmascara!

¡Y qué corazón no remolca una pasión clandestina!

¡Y qué noche no vendió su alma al diablo

por yacer -a cuatro manos- en el tálamo del día!


11 junio 2011

El dobladillo del tiempo



Descoso el dobladillo del tiempo para dar otra oportunidad
a los libros que abandoné -cual perro añoso-
en la cuneta de mi arrogancia.
A las sonrisas que eclosionaron entre la sal de mis párpados.
A los vacíos que llené a medias.
A las palabras que se enquistaron en mi garganta.
Descoso el dobladillo del tiempo para dar otra oportunidad
a las locuras que doblegué a fuerza de raciocinio.
A los caminos que no transité.
A los que arrasó mi pisada.
Descoso el dobladillo del tiempo para dar otra oportunidad
a los rescoldos del viento del sur.
A los latidos que ansiaron ser ave.
Y a los prejuicios con que abatí sus alas.
... 

21 febrero 2011

...relativa-mente


Tengo un pequeño terreno. Bueno, lo de pequeño es relativo, depende de la altura del google maps desde donde se mire. Llevo diez años sembrándolo de sueños. Antes sembraba también patatas, puerros, lechugas, rabanitos...pero los sueños dan menos trabajo. Bueno, eso también es relativo, y depende fundamentalmente del Euribor.
El caso es que mientras ambos, sueños y Euribor, se ponen de acuerdo, allí hay poco más que un almacén donde dormitan herramientas, ropa en desuso, y trastos varios, ¡ah! y un frigorífico que sólo congela.
Hoy entraron a robar. Pero eso, como todo, también es relativo.

No han tocado ni un trasto, ni una herramienta, ni una ropa. Pero se han llevado toda la comida. Toda. Y juro que el "frigo-congelante" estaba repleto. ¿Acaso eso es robar?


En fin, a falta de viandas, seguiré comiéndome el coco...
Espero al menos que, sea a quien sea, le aproveche.
Relativamente...

26 enero 2011

Ya se ha ido


(Imagen tomada de la red)


Ya se ha ido. Tampoco éste tuvo clemencia.

Quise atraparlo en el breve instante en que,

acurrucada en mi regazo, te dejaste acariciar el pelo,

y me pediste que encendiera la radio.

“Pon música”, dijiste.

Y cuajada de crisis, miseria, quebrantos, 

desfiló ante mí una rueda de emisoras baldías.

“Ésa, deja ésa.”

Un arpegio. Una guitarra. Tu respiración. La mía.

Fuera, sólo la niebla.

...